viernes, 19 de febrero de 2010

Suite "The Planets" de Holst.

Apenas unas semanas antes del estallido de la Primera Guerra Mundial Gustav Holst terminó la composición de "Mars: The Bringer of War", primer movimiento de la Suite "The Planets", que vista tuvo el hombre (los demás los fue componiendo en años sucesivos).



Como las suites son una colección de elementos contrapuestos, Marte tiene su opuesto, que es "Venus: The Bringer of Peace".



"Mercury: The Winged Messenger" y "Jupiter: The Bringer of Jollity" son las partes intermedias de la obra, digamos que las obras largas pueden ser tomadas muy en serio y se suele colocar alguna parte más ligera, no en profundidad de la obra, sino en agilidad melódica e interpretativa, aunque el de los dos, el segundo es más serio,a aparte de ser el movimiento más conocido de la obra.





"Saturn: The Bringer of Old Age" es el movimiento dónde Holst echa el resto en su estilo interpretativo



"Uranus: The Magician", tras Saturno, se requiere otro movimiento ágil que haga de contraste tras el anterior y el último, esa es la base de una suite.



"Neptune: The Mystic"



Y Plutón fue descubierto en 1930, así que no entra en la suite, aunque en el año 2000 se le añadió un octavo movimiento, "Pluto: The Renewer", aunque estilísticamente no tiene nada que ver con la suite, lógico, porque la compuso otra persona en otra época.



Aunque algunos títulos de los movimientos puedan llevar a engaño, esto no tiene nada que ver con los dioses grecorromanos, Marte no es el dios Marte, dios de guerra, ni Mercurio es el dios mensajero de los dioses, pero tampoco es una interpretación astronómica, porque si lo fuera ¿dónde está la Tierra?.
Gustav Holst fue desde joven una persona curiosa en términos místico-religiosos, aficionado a la Teosofía, movimiento que sostiene que todas las religiones son facetas de una misma realidad interpretadas desde una realidad social e histórica diferentes, y lógicamente una de esas facetas es la astrología, interpretaciones astrológicas de lo que representa cada planeta.
Sobre cada interpretación se deplegan unos calificativos en el título del movimiento, y alrededor de esos calificativos se despliga una musica que quiere representalos.
Una evidencia de esta idea es que en el libro "The Art of Synthesis" del teósofo y astrólogo Alan Leo, el nombre del capítulo sobre Neptuno es exactamente el mismo que en la suite de Holst.

A lo más que se puede llegar sobre la interpretación de la suite es que es una metáfora de las fases de la vida, con Marte como un doloroso principio (parto), Venus una pacífica infancia, Mercurio como muestra del cambio en la adolescencia, Jupiter la muestra de la edad adulta pero aún joven, Saturno el principio de la vejez, Urano una ancianidad en la que igual ya se nos ha ido un poco la cabeza y nos convertimos en el abuelo algo locuelo, y Neptuno, que es de una enorme quietud, como la espera de la propia muerte o incluso el transito hacia ella.

Teniendo en cuenta que es la misma época que Schoenberg y Stravinski, la obra tiene muchos usos no armónicos, giros extraños, pero más similares a Stravinski, manteniendo una estética más estandar, que a la total amorfidad de Schoenberg.

Curiosamente Plutón, que el mismo Holst se negó a componer en sus últimos años de vida (Holst fue un One Hit Wonder y terminó odiando esta obra porque nunca tuvo el mismo éxito), y aunque la composición es claramente moderna y no tiene nada que ver con el resto de la obra, el título está estupendamente escogido, Plutón, el renovador, esto es otro ejemplo de Teosofía, de parte del hinduismo en el que Holst estuvo muy interesado en vida. Desde este punto de vista, la muerte, destrucción, es necesaria para el nacimiento, como en el samsara hindú, pero esto queda más allá de la propia obra ya que como dije ni Holst quiso componer un Plutón.

jueves, 18 de febrero de 2010

"La Isla de los muertos", Opus 29, de Sergei Rachmaninov

"La Isla de los muertos", Opus 29, de Sergei Rachmaninov, es un poema sinfónico basado en la serie de cuadros homónima de Arnold Böcklin:



Serie porque el buen hombre hizo diversas versiones de la misma escena, una isla con cipreses, rodeados por un risco rocoso con estancias enclavadas en la roca y una barca con el barquero y una figura blanca en pie se dirige a ella. Cada cuadro difiere en detalles y estilo, pero la escena siempre es la misma.

Bueno, o eso pensamos, porque por lo visto Böcklin nunca explicó el significado de esta obsesiva pintura, y suponemos que la barca es la de Caronte cruzando con un alma la laguna Estigia llegando a las puertas del Hades. El caso es que Rachmaninov toma esta interpretación y le da a su obra ese carácter sombrío.

¿Y qué es un poéma sinfónico?, es una obra de un sólo movimiento, generalmente para orquesta, que se centra en un objeto no musical.
Tuvo su origen en el romanticismo (aunque lo de Rachmaninov es un romanticismo muy tardío), que como ya se dijo se centraba en la evocación de sentimientos no expresables mediante la razón usando la música como medio, en este sentido el poéma sinfónico es una particularización técnica de esta idea, ya que busca esto mismo interactuando con otros artes. Un poema sinfónico se refiere a un cuadro, como es el caso, un escrito, un poema evocando las mismas sensaciones que nos evoque el otro objeto artístico.
Estos son sus únicos condicionamientos, puramente de contenido, mientras que su forma no está condicionada, aunque el adjetivo "sinfónico" nos pueda llevar a engaños, no hay relación formal con las sinfonías, pudiendo parecerse, o no, según el compositor considere que esto ayude a su objetivo evocador.

Los enlaces (gracias a Miguel):





Ni que decir tiene que lo suyo es escuchar la música con la imagen del cuadro delante.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Canción de primavera.

Ya lo dija alguna vez, pero la música romántica no se basa en el romanticismo amoroso, sino en que hay cosas en la realidad no expresables mediante la razón, sino que se debe recurrir a la evocación de sentimientos para su expresión. Esto a nivel musical, que es el arte más abstracta, llega a su extremo más exagerado, porque la evocación en sí es algo básico en la música.

Evocaciones previas en música intentan ser "realistas", evocar objetos mediante la imitación de sus sonidos mediante sonidos y ritmos similares, pero en esta época la evocación se abstrae aún más, no se evoca cosas tangibles, sino directamente se evocan sensaciones, los sentimientos que se tienen al estar inmerso en la situación evocada, de forma que la música no es un fin en sí misma, sino un medio para sentir lo que se pretende mostrar.

De Felix Mendelssohn se puede decir que fue el mayor exponente romántico, y más en una Alemania en proceso de unificación, niño prodigio, de una familia de judíos conversos al cristianismo.

Ahora imaginemos, una película de cine mudo, el protagonista realiza cualquier tarea trivial, como por ejemplo estar simplmente sentado, pero de repente se aparece ELLA, es hermosa, dulce, recatada, y él se queda embobado, y suena esta música:



Llamado "Frühlingslied", o "Canción de primavera", del Opus 62, que es el quinto libro de la serie de libros Canciones sin palabras, una recopilación no exhaustiva de composiciones para piano solo que fue componiendo a lo largo de su no muy larga vida.

Existe una teoría sobre el origen de "Frühlingslied", que es la teoría británica, ya que desde joven Mendelssohn viajó por Europa para darse a conocer como el joven genio que era, y uno de los sitios que visito fue Gran Bretaña (y le tuvo que gustar porque compuso la sinfonía "Escocesa"). Allí, en Gran Bretaña el nombre de "Frühlingslied" es el de "Camberwell green", que es uno de esos jardines acotados tan conocidos que existen en Londres, al lado de dónde al parecer vivía una pariente suya.
Pensemos en Londres en aquella época, una ciudad enorme y gris, en la que el clima no suele acompañar, y para que un jardín luzca realmente tiene que ser en cuatro o cinco días contados a lo largo del año. Esa es la cualidad más brillante de la evocación, no nos expresa como es tal o cual cosa en tanto a su estado físico, sino que expresa la sensación de un momento fugaz, que igual si nosotros intentamos ver por nosotros mismos no veríamos porque tiene que suceder que esta situación suceda, la evocación recuerda cosas que son reales, pero que igual no lo son siempre que nosotros queremos que lo sean.

Un saludo.